La mujer ejerció los cuidados de las nenas de manera exclusiva desde que se separó de hecho del padre de las mencionadas. Además, la condena impuesta al hombre lo inhabilita a otorgar el permiso correspondiente.

Por ello se inició el reclamo, que incluyó la autorización para un viaje puntual y la posibilidad de que la misma se extienda hasta que las niñas alcancen la mayoría de edad, evitando así trámites judiciales reiterados en el futuro.

Así lo requirió con la asistencia de la Defensa Pública quien enmarcó el pedido enfatizando en el cumplimiento integral de los derechos y el interés superior de las niñas. En función de la urgencia del caso, en cinco días hábiles la magistratura hizo lugar al pedido.

La sentencia hace referencia al Artículo 12 del Código Penal que establece que la reclusión y la prisión por más de tres años implican la pérdida de la patria potestad mientras dure tal condena. Alude además a lo establecido en el artículo 638 del Código Civil y Comercial, que establece el concepto de la responsabilidad parental como «el conjunto de deberes y derechos que corresponden a los progenitores sobre la persona y bienes del hijo, para su protección, desarrollo y formación integral mientras sea menor de edad y no se haya emancipado».

De esta forma, la Jueza de familia interviniente hizo lugar a la demanda destacando que las niñas pueden salir del país en compañía de su madre o de la persona que ella designe, hasta cumplir la mayoría de edad.

Cabe recordar que, más allá de lo establecido en el Código Penal, la Dirección Nacional de Migraciones requiere una resolución judicial que confirme esta situación para habilitar la salida del país, por ello fue necesario que se brindara certeza sobre el caso a través de una sentencia judicial, en la cual se dispuso además la fehaciente información a dicho organismo de lo decidido.