La Fiscalía realizó el relato de los hechos endilgados y dijo que el acusado, junto a otra persona aún no identificada, abordó a una familia que estaba ingresando a bordo de un automóvil a su vivienda el 9 de Marzo pasado a las 3 de la madrugada.

“En su accionar, aprovechando que el conductor bajó del auto a abrir el portón, descendió de la moto en la que se trasladaba y le exigió al hombre la entrega de pertenencias, mientras lo apuntaban con armas de fuego con el dedo en el gatillo. Ante la negativa de aquel, efectuó disparos (en cantidad a determinar) que impactaron no solo contra el damnificado sino además contra su hijo”.

La víctima, agente de la policía federal, logró agarrar “su arma reglamentaria con la cual disparó para defenderse y defender a su familia”. No obstante tanto él como su hijo de 13 años de edad recibieron heridas de arma de fuego, ambas de gravedad por el tiempo de curación previsto mayor a los 30 días. El imputado también “presentó múltiples heridas de arma de fuego que lo mantuvieron internado desde aquel día hasta la jornada de ayer, en la que le dieron el alta y horas más tarde le formularon cargos.

Luego de mencionar el sustento probatorio que avala la formulación de cargos, la Fiscal Mariana Giammona destacó que restan realizar medidas entre ellas las cámara gesell a los menores de edad que presenciaron los hechos y preservar la declaración de los testigos para el juicio y evitar la connivencia con quien lo acompañó en los hechos y no pudo ser identificado. Estos fueron algunos de los argumentos dados a la hora de fundamentar la prisión preventiva que la acusación pretendía para el imputado.

En ese sentido, y en relación al estado de salud del joven, aclaró que se había coordinado con el Servicio Penitenciario Provincial que pueda ser alojado en un espacio en el que se le brinden los cuidados sanitarios necesarios.

El Defensor oficial Pedro Vega, que ejerció la representación legal del imputado, se opuso a la posibilidad de que le sea impuesta tal medida cautelar, la más gravosa que prevé el código procesal penal. Destacó en este sentido que, para garantizar el éxito de la investigación, la colocación de una tobillera de control satelital y la prohibición de salir de su domicilio y de utilizar medios de comunicación y redes sociales sería suficiente, máxime considerando el estado de salud del joven que aún tiene secuelas físicas de gravedad.

Prisión preventiva: ¿Puede el acusado entorpecer la investigación?

Ese es uno de los requisitos previstos, junto a un eventual riesgo de fuga, para que se otorgue una prisión preventiva. Luego de tener por formulados los cargos y determinar la apertura de la investigación penal preparatoria por el término de 4 meses, el Juez Juan Pedro Puntel escuchó la argumentación de las partes a favor y en contra de la imposición de tal medida cautelar.

Destacó en ese sentido que, previendo un debate que juzgue los hechos acaecidos, “se hace necesario preservar los testimonios de la investigación por lo que debe ser garantizada la información que tiene la fiscalía y que se convierte en prueba en un debate”. Agregó además que el caso requiere además que se le otorgue una “protección especial a víctimas menores de edad”.

Enfatizó en ese sentido que “existe una clara posibilidad de entorpecimiento de la investigación a través de la actividad que el imputado pueda ejercer a esta familia” por lo que dispuso el traslado del imputado al Complejo Penal por el mismo lapso de la investigación.