Con base en los decretos dictados a nivel nacional que impiden el corte de servicios considerados esenciales – energía eléctrica, gas por redes y agua corriente, telefonía fija o móvil e Internet y TV por cable- la norma impulsada por el Frente de Todos busca congelar hasta fin de año los aumentos en el servicio de agua potable operado por ARSA, y cooperativas en Río Negro.

“Se busca de esta manera garantizar el acceso a este servicio que es quizás el más básico de los servicios públicos; precisamente por no ser un mero confort sino por ser esencial y a su vez mitigar el impacto que el costo del mismo pueda generar sobre los ciudadanos de nuestra provincia”, señala el proyecto que alude además al “rol preponderante (que importa) para evitar la propagación del virus –COVID-19-, por lo cual resulta primordial brindar el servicio de agua potable a todos los consumidores del sistema”.

De aprobarse, los distintos prestadores deberán abstenerse de aplicar nuevos aumentos en la facturación hasta el 31 de diciembre.

ARSA, la principal prestadora del servicio de agua corriente en Río Negro cuenta con 215.000 usuarios. Otros son abastecidos por cooperativas en distintas ciudades de la provincia.

Desde 2018 las revisiones tarifarias de ARSA se efectúan cada cuatro meses. Sin embargo, la Legislatura aprobó el año pasado una norma que permite aumentos automáticos sin necesidad de llamar a Audiencia Pública para discutir las subas.

“El agua adquiere un rol preponderante para evitar la propagación del virus –COVID-19-, por lo cual resulta primordial brindar el servicio de agua potable a todos los consumidores del sistema”, considera el proyecto.

“Hay una instrucción constante del ministerio de Salud de la Nación para que nos lavemos las manos con frecuencia, como una de las principales medidas de prevención del contagio del Coronavirus”, señalaron desde el bloque del FdT, “en este contexto de retracción económica el Estado debe garantizar la provisión de un servicio esencial como es el agua, y uno de los mecanismos es que todas y todos los rionegrinos puedan pagar el servicio sin sufrir nuevos golpes en el bolsillo ni restricciones en el uso del servicio”.

“Un servicio”, recordaron, “que ya tiene un alto costo tras los fuertes aumentos autorizados durante el gobierno de Alberto Weretilneck”.