En el marco de esa audiencia el hombre -cuya identidad este medio no da a conocer para evitar la revictimización de las denunciantes- admitió ser el autor de estos hechos, aceptando el monto de la pena y la calificación de “abuso sexual gravemente ultrajante (en forma continuada) y de abuso sexual con acceso carnal, ambos agravados por la convivencia preexistente entre victimas y victimario”.

Los abusos de las niñas hijas de la pareja del imputado que, en realidad es su esposa porque contrajeron matrimonio y se mantienen en convivencia, fueron cometidos entre 2006 y 2018 inclusive, cuando las víctimas tenían entre 7 y 15 años. Todos ocurrieron en las viviendas que compartieron, siempre bajo amenaza, obligándolas a situaciones de extrema violencia sexual.

EL FALLO

En la sentencia, el juez de Juicio Marcelo Chironi detalló el cúmulo de evidencias que llevaron al hombre a admitir los hechos, destacando lo señalado por las víctimas, así como el de abuela y tías a quienes las niñas trasmitieron lo sucedido.

También tuvo en cuenta el juez los informes de la Oficina de Atención a la Víctima, del Cuerpo de Investigaciones Forense que da cuenta de sintomatología de estrés postraumático e informes escolares.

En el fallo Chironi ponderó “las descripciones de la prueba colectada, efectuada por la Fiscalía que ubican con claridad al acusado frente los hechos en un certero avance hacia la confirmación de las hipótesis delictivas, más allá de toda duda razonable”.

Consideró que “los relatos de las víctimas resultan serios, contundentes, coherentes y con descripciones de detalles e interacciones, que a las claras dotan de credibilidad a los mismos, apuntalados además por los relatos de varios integrantes de la familia, terapeutas y ex pareja, a quienes les contaran en consonancia con sus propios relatos los abusos padecidos”.

La pena responde a la autoría de los delitos de “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la convivencia en forma continuada; abuso sexual con acceso carnal agravado por la convivencia preexistente”.

El viernes pasado y según lo informado por “Lo Principal” tras la cobertura de este juicio abreviado el imputado llegó con control de pulsera electrónica y se fue de la misma forma advertido que una vez que fuera firmada la sentencia debía presentarse en la comisaria más cercana para iniciar su detención, de lo contrario se agravaría su situación en relación a la posibilidad de futuros beneficios durante el proceso carcelario.